Orlando Victor Pérez Cabrera

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Orlando Victor Pérez Cabrera   Bienvenido a la Paz para nuestro tiempo y el tiempo de nuestros hijos  y los hijos de sus hijos  a través del cultivo de las Bellas Artes en los jardines de su mente y sus corazones

MIENTRAS LA LUZ ME AMANECE     Soy una parte de ese sueño roto que a pedazos cae sobre la mugre del asfalto. Hay un vacío en mí que suena hueco bajo esta lluvia áspera, con el frío envenenándome la piel y la humedad calando mis pulmones.   Chirría la puerta como si un alma en pena penetrara de repente para hacerle compañía a esta magra soledad.   Soy una piedra lunar, soy un zapato extraviado, soy ese canto rodado en las manos del azar. Soy un chasquido del mar que la roca desvanece, pero se retira y crece para un golpe corrosivo que me deje redivivo mientras la luz me amanece.

PAX ANIMAE     Te sobrevendrá una paz irrebatible, una paz inexorable, una paz antesala de Dios y el Paraíso. Te sobrevendrá una paz sin rescoldos, sin verdades ni mentiras, sin techo agujereado por la lluvia. Una paz ni para mirar al Universo. Y no sabrás qué hacer ante una paz que se engulle tus comidas. Y no sabrás qué hacer cuando te registren los bolsillos.

PLUVIA "Esta tarde llueve, como nunca y no tengo ganas de vivir, corazón".   César Vallejo   Hoy llueve de manera inclaudicable, y no estoy en París, y aún tengo ganas de vivir, oh, maltrecho corazón. Hoy llueve no contra los cristales ni sobre la hojarasca ni sobre el pavimento. Hoy llueve en mí y la madre me ha parido la nostalgia. La memoria se diluye en cada gota: ya no soy más que un río sin riberas. Hoy llueve como nunca y me contemplo árbol que busca sus raíces.

RELECTURA   Me gustas cuando hablas porque estás ¡tan presente! y me oyes de cerca y mi voz te provoca... Gata en celo en acecho. Te pareces a la palabra desatino. Déjame desbocarte con mordiscos perennes; déjame desvestirte lentamente en el nido. No me gustas si callas: prefiero que hagas ruido cuando rozo la boca sobre tus pechos tibios. Y nada sigue igual, porque ya no es lo mismo. Me gustas cuando gritas como pidiendo auxilio.

OR NOT TO BE. Halar el viento hasta aquí para que se esfume el aliento que bulle en estas horas amargas. Para bogar al candelabro de los días, para enarbolar un sueño entre Escila y Caribdis, ser ceniza inflamable.

NUEVAS RUINAS CIRCULARES   Helado por el aura de las cosas, al alba son los gritos. Desgarrones que ponen bocarriba las canciones y pintan de nostalgia mariposas.   Tirado por mil bestias-emociones, me filtro entre las horas caprichosas, mas sueño con que sean más hermosas las patrañas que enervan corazones.   Una bala canina me persigue y el invierno no hay beso que lo abrigue: los círculos se han vuelto triangulares,   locura de las ruinas circulares. Me vuelvo como fénix de la acera quemando los boletos de la espera.

AL BORDE DEL ABISMO   Me tengo que cuidar de un desatino, de cada tentación que me subyuga; me tengo que cuidar de cada arruga, de la trampa falaz del cruel destino.   Me tengo que cuidar de la inocencia, del humo y de los polvos acezantes. Me tengo que cuidar de rocinantes, del postulado estricto de la ciencia.   Me tengo que cuidar del desengaño; de la hora y el mes, y el día, el año; de noches destiladas de poesía...   Pero si Amor me acecha como un sismo, verás a un ciego al borde del abismo, con alas que robó a la fantasía.

Orlando Víctor Pérez Cabrera (Cumanayagua, Cuba, 1950). en Lengua y Literatura Española e Inglesa. Máster en Educación. Profesor y editor. Escritor e investigador con varios libros publicados. Textos suyos aparecen en diferentes publicaciones nacionales y extranjeras. Miembro de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC).   Selecciones de Cuentos, PDF Contenido completo Oprima aqui,Gracias