De ahí que no sea extraño que su vida haya girado en torno al número tres, desde su
triple nacionalidad hasta las tres personas que le acompañaron durante su enfermedad y posterior deceso. Juan Rulfo
intuyó ese triple sentido pues en un sentido homenajen que una veintena de escritores le rindiera a Cortázar,
el mexicano, de su puño y letra, escribió: "Lo queremos porque es bondadoso. Es bondadoso como ser humano
y muy bueno como escritor. Tiene un corazón tan grande que Dios necesitó fabricar un cuerpo también grande
para acomodar ese corazón suyo. Luego mezcló los sentimientos con el espíritu de Julio. De allí
resultó que Julio no sólo fuera un hombre bueno, sino justo. Todos sabemos cuánto se ha sacrificado por la justicia. Por las causas
justas y porque haya concordia entre todos los seres humanos.
Así que Julio es triplemente bueno. Por eso lo queremos." (Juann Rulfo, Por eso queremos tanto a Julio. 20 autores para Cortázar, en Queremos tanto a Julio, Edición preparada por Hugo Niño,} Editorial Nueva Nicaragua, Managua, 1984).
Tres veces Julio, nace como producto de lo que sería un artículo periodístico sobre las tres mujeres que acompañaron a Cortázar
a lo largo de su vida; a medida que leía y avanzaba
en la investigación fui encontrando nuevas relaciones
del escritor argentino con
la triplicidad que desembocaron en los trece capítulos que componen este volumen.
Son varios los textos biográficos
que han abordado la existencia del Cronopio Mayor;
sin embargo, esta obra pretende dar
una mirada distinta desde la óptica de una exploración en las diferentes facetas del escrito argentino teniendo la triplicidad como hilo conductor.
Bernardo David David