¡DOBLE NACIONALIDAD, DOBLE DOLOR! ---
Mi Hogar, mi dulce hogar-mi Colombia de cuna, Estados Unidos de residencia", yace herido. En algún lugar de nuestro universo
maltratado existían fantasmas que por su existencia comprobada han dejado de serlo. Tras de ellos fuímos muchas veces para
darles fin y otras tantas regresamos luego de unos cuantos misilazos nocturnos, a refugiarnos en nuestro aislamiento de superpotencia,
satisfechos de la revancha y confiados en la fuerza del mensaje balístico, intencionalmente bien cargado de aparente democracia
y promesas de libertad.
¿Actuaremos igual en esta hora de encuentros mortales con El Terror? La realidad nos conmina a partir hacia el infierno. Si.
Es el infierno el destino de la nueva y dudosa coalición de naciones; su misión, la erradicación del enemigo; su nombre, terrorismo,
alias, Osama Bin Laden, FARCs, ELNs. PARAS, CASTROs, SADAMs, SHARONs, ARAFATs, ABUSO SEXUAL, IMPUNIDAD, AVARICIA, TRAICION,
ARROGANCIA, alias POBREZA, DESIGUALDAD, IGNORANCIA, INEPTITUD, ENVIDIA, DESPROPORCION, RETALIACION, IMPACIENCIA, DROGAS,
ANFETAMINAS, GUERRA, INDIFERENCIA, PREPOTENCIA, VANIDAD, opiniones cuadradas en mentes polarizadas, y OLVIDO, costoso olvido
de tanto holocausto y tanto horror pasado.
Hoy -- horrorizados por la infamia cometida el 9/11 en nuestra patria de adopción - vamos confundidos y esquizofrenicamente
alertas por entre un mundo violentado y a la deriva. Nuestra juventud, semieducada en la historia de las guerras de sus mayores,
siente en sus carnes frescas y en sus vidas transformadas, la espantosa viviencia de su propia guerra, y hasta en la propia
cuna, los recién nacidos crecen bajo el sino de una tragedia colectiva y globalizada.
Me niego a concluír apocalipticamente este ensayo; creo en la igualdad de las razas; rechazo toda distinción de credo, etnia,
condición social, moral, económica y/o política y remito este mensaje a todos los hombres de buena voluntad desde Mi Hogar,
mi Dulce Hogar colombiano y norteamericano; ese hogar donde se sufre colectivamente con todos nuestros hermanos, el dolor
nacional y universal que nos causa la tragedia que asola a nuestras dos patrias convertidas en una sola por aquello de la
doble nacionalidad -- destino y derecho inalienable al que nos condujo la bíblica migración humana.